Respondiendo a una petición recibida a través de mi página de Facebook, hoy quiero explicaros cómo podéis evitar los atracones de comida.
¿Quién no se ha visto en una situación parecida? Ahora que llega el fin de semana, todos pensamos “carpe diem” y lo cierto es que un atracón no es preocupante, si se produce de manera puntual. El problema real es cuando se convierte en todo un hábito.
Por lo general, la causa de los atracones de comida está relacionada con un estado de estrés, ansiedad o nerviosismo, que se intenta aplacar mediante la ingesta de grandes cantidades de comida. De hecho, esto suele ser contraproducente porque después sobreviene un sentimiento de culpabilidad. Además, si convertimos los atracones de comida en un recurrente mecanismo de respuesta a dichos estados de ánimo, corremos el riesgo de almacenar una mayor cantidad de grasa y padecer sobrepeso.
A parte de esta peligrosa vinculación emocional que se establece con la comida, no debemos olvidar que los atracones están directamente relacionados con el apetito, así que también debemos aprender a controlarlo.
Teniendo en cuenta tanto el factor psicológico como físico, ¿qué podemos hacer para evitar los atracones de comida? Éstos son algunos consejos:
- Haz 5 pequeñas comidas al día. Si consumes alimentos nutritivos cada 3 o 4 horas, comprobarás que ese apetito tan fuerte que sueles tener desaparece.
- No tengas al alcance de la mano alimentos que no te conviene comer. Es la mejor forma de no caer en la tentación.
- Cuando te sientas estresado, ansioso o deprimido, realiza alguna actividad física que te guste. Conseguirás relajarte y sentirte mejor.
- Procura no comer mientras realizas actividades que requieren toda tu concentración como ver la televisión, leer un libro o trabajar.
- Mantente más entretenido, saliendo de casa y haciendo vida social.
- Busca el apoyo de otra persona. Una buena conversación con un amigo llena más que una suculenta comida.
- Prioriza siempre la salud al placer y nunca intentes satisfacer tus necesidades emocionales a base de comida.
Y recordad que, si no habéis sido capaces de evitar ese primer atracón de comida, debéis encontrar el motivo que os ha llevado a hacerlo para poder remediarlo y que no se convierta en una costumbre.
Espero que estos consejos os sean de ayuda, especialmente, para el amigo de Facebook que planteaba el tema. Ya sabéis que cada persona es única y lo que es infalible para una, puede ser que no lo sea tanto para otra.
Tened en cuenta que un profesional puede ayudaros a encontrar la solución más idónea para vosotros.